Como bien dije antes, el Edu aún no me ha pasado las fotos que hicimos durante la pasada semana en Cartagena, pero eso no significa que no os pueda contar un par de cosillas interesantes.
Se supone que cuando una persona va de vacaciones o, en este caso, se muda de casa, lo primero que hace al llegar al nuevo hogar es deshacer las maletas e instalarse, aunque también es cierto que el Edu no es persona.
Llegamos a nuestro piso el domingo 21. 19:30 de la tarde. Todo estaba más o menos limpio y en su sitio. Chema y yo fuimos a nuestras respectivas habitaciones a descargar la ropa y utensilios en nuestros armarios y estanterias, mientras que el Edu se sentó en el sofá, acercó un mesa pequeña de cristal y se puso, ni mas ni menos, que a motar las piezas de un coche teledirigido.
23:00 de la noche. La mierda empezaba a notarse después de cenar.
02:30 de la madrugada. Los nervios por empezar pudieron con nosotros. Chema se acostó, y al Edu y a mí nos dio miedo dejar la Play Station sola, y como caballeros que somos, le hicimos compañía.
Amí me dieron el turno de tardes mientras que al Edu y al Chema el de mañanas. Tras el primer día en la universidad, el Edu nos contó que había conocido a una persona, a una chica que se había sentado a su lado. Según el Edu, es que la chica está igual de ciega que él y por eso se sentaron juntos en primera fila... Pero hay que ser positivos, ya tienen algo en común.
Continuara...
sábado, 27 de septiembre de 2008
52. Primer día.
DE VUELTA
¡Muy buenas a todos!
Después de este brusco parón vacacional, he decidido que ya es hora de volver a narraros nuestras apasionantes aventuras.
Han comenzado las clases, y como muchos de vosotros sabéis, Chema, Edu y yo vivimos en un piso de Cartagena. Puesto que allí no tenemos internet (de momento) y por la falta de tiempo, las actualizaciones se realizarán durante los fines de semana, donde os contaré todas y cada una de las anecdotas protagonizadas seguro por el Edu.
También poco a poco os describiré y os mostraré el lugar donde vivimos, nuestro día a día y por supuesto os explicaré cómo el Edu se las apaña para hacerse de comer. Increible, ¿verdad?
Todo esto y mucho más, cuando el Edu me pase las fotos.
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